Dios nos dejó escrito en su palabra:
por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios;
Romanos 3:23
Aunque nunca me conozcas, la palabra “todos” te asegura que yo he pecado. Dios dice que todos han pecado. No importa que tan viejo o joven, rico o pobre, todos han pecado. Puedes saber que he pecado porque Dios lo dice en su palabra. Yo puedo saber que tú has pecado porque la palabra “todos” también te incluye.
La mayoría asume que pecado es hacer lo que Dios nos prohíbe. Pero la Biblia también dice que es pecado omitir lo que Dios nos manda a hacer.
Así que, al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.
Santiago 4:17
Hacer algo con incredulidad también es pecado:
Pero el que duda, si come, se condena, porque come sin fe, y todo lo que no es de fe, es pecado.
Romanos 14:23
De acuerdo con Dios, tener un solo mal pensamiento es pecado.
Porque como piensa en su corazón, así es él…
Proverbios 23:7
El pensamiento del necio es pecado;…
Proverbios 24:9
Dios dice que todos hemos pecado. No hay nadie caminando sobre la tierra ahora mismo que pueda decir: no tengo pecado. No importa quién seas ni de donde provengas, Dios, que nunca miente, dice que has pecado y que eres un pecador.
Aun si físicamente no has cometido el pecado, Dios dice que todos han tenido pensamientos malos, y a sus ojos, pensarlo es como hacerlo.
Debido a nuestro pecado, siempre quedaremos cortos para merecer el cielo. Ninguno tiene lo que se necesita para ganarse el cielo. No importa cuán buenas sean nuestras obras o el mucho esfuerzo que pongamos en ello.
No solo que no podemos alcanzar el cielo, la Biblia también dice que hay un castigo por el pecado; lo que hemos ganado o nos merecemos.
Porque la paga del pecado es muerte;…
Romanos 6:23
Si la vida eterna es el cielo, entonces hay una muerte eterna. La Biblia dice que es un lugar llamado infierno.
Nota la palabra “paga”. Un pago es la recompensa o el castigo que recibimos por nuestras acciones, nuestras obras. Dios dice que un pecado, singular, es suficiente para merecer el castigo de la muerte.
Entiende que si Dios permitiera que un solo pecado entrara al cielo sin castigo, eso destruiría el maravilloso lugar que es. Ya no sería perfecto, sería como la tierra.
Pero los temerosos e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras, y todos los mentirosos, tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.
Apocalipsis 21:8
La mala noticia es que todos hemos pecado y debido a esto, todos merecemos ir a ese lugar llamado infierno que finalmente es el lago que arde con fuego y azufre.
Una vez en el infierno no hay forma de salir. Una vez alguien es enviado a ese lugar, estará allí para siempre. Este no era el plan de Dios para la humanidad, Él hizo el infierno para Satanás y sus demonios.
La mala noticia es que nuestro pecado nos llevará allí. Pero Dios también nos da una buena noticia. Evangelio significa buena noticia.
Porque la paga del pecado es muerte; mas el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
Romanos 6:23
Nota que la Biblia dice que el infierno se gana, es un pago, pero dice que el cielo es un don o un regalo de parte de Dios.
Un regalo se ofrece a alguien sin esperar nada a cambio. No le puedes pagar a alguien que te ofrece un regalo. No es el que recibe el regalo quien debe pagar el precio, es quién lo ofrece. Quien ofrece el regalo debe primero comprarlo.
Un pago por otro lado es lo que recibimos por algo que hacemos. Es el salario que ganamos por trabajar por ejemplo, algo que logramos por esfuerzo propio.
Si Dios es quien entrega el regalo, Él es quien debe pagarlo. Es como cuando entras a una tienda, debes pagar el precio completo de un artículo antes de que puedas llevártelo y ofrecerlo a otra persona como regalo. Este mismo principio aplica con el regalo de la vida eterna que Dios quiere darte. Dios te está ofreciendo un regalo que Él compró y que dura para siempre.
Por medio de la muerte de Jesús en la cruz y su sangre derramada.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros; pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Efesios 2:8-9
En esa voluntad nosotros somos santificados, mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una sola vez.
Hebreos 10:10
Cuando Jesús murió en la cruz, Él murió por tus pecados pasados, presentes y futuros. Murió por todos ellos. Su muerte hizo posible que pudiera ofrecer el regalo gratuito de la vida eterna. Él murió en la cruz mucho antes de que nacieras. No solo murió por todos tus pecados sino también por los de todo el mundo. Él te ofrece pagar el castigo de tu pecado por completo.
Cuando alguien te ofrece un regalo, tus alternativas son: tomarlo o dejarlo.
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.
Juan 1:12
Nota que no dice que quien se vuelva Bautista, Católico, Luterano, etc. Es recibirlo a Él (me refiero a Jesucristo y su pago). Me gustaría que dijera que debes unirte a una iglesia específica, de esa manera todos tendrían que ir y aprender a limpiar sus vidas para ser salvos, pero no es así.
No dice que debas ser parte de una iglesia particular (aunque a Dios sí le importa a qué iglesia asistimos), tampoco dice que debamos dar dinero (aunque a Dios le interesa que demos al necesitado). Es un regalo gratuito que simplemente debe ser recibido.
y con todo engaño de iniquidad en los que perecen; por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.
2 Tesalonicenses 2:10
No es porque han pecado mucho o porque las buenas obras deben pesar más que sus maldades, es simplemente porque no lo recibieron. No quisieron creer ni poner su confianza en Dios para dejar que Jesucristo pagara por sus pecados. Están engañados pensando que ellos mismos pueden pagar su entrada al cielo con sus buenas obras o el otro extremo, piensan que han hecho tanto mal que no merecen recibir tan maravilloso regalo. Pero ninguna de estas creencias son correctas ni están en la Biblia.
Es por esto que Dios nos advierte que debemos arrepentirnos.
Os digo: No, antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.
Lucas 13:3
Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora demanda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;
Hechos 17:30
Nota que no dice “arrepentirse de pecados” como si se tratara de sentir culpa o dejar de pecar. El arrepentimiento en la Biblia se refiere a cambiar de idea, de parecer, de opinión. Ir por un camino y cambiar de dirección.
Tal vez te hayan enseñado que debes ganarte tu entrada al cielo o creas muchas ideas y filosofías, pero Dios te dice que debes arrepentirte, dejar de creer en tus ideas y empezar a creer que la Biblia es la verdad.
La Biblia dice la verdad cuando señala que somos pecadores, dice la verdad cuando enseña que los pecadores van al infierno y dice la verdad en cuanto a cómo se recibe la salvación. Debes arrepentirte.
Una buena definición de arrepentimiento es: estar de acuerdo con Dios aun en contra de ti mismo.
Así que Dios dice que el cielo, la vida eterna, es un regalo gratuito que debe recibirse.
Si yo tuviera $1000 en mi cuenta bancaria y te dijera que es un regalo para ti, no puedes ir al banco a pedirlos porque no te darían acceso a mi cuenta. Primero tendrías que pedirme que te los transfiera, porque solo yo tengo acceso. Para recibir el regalo del cielo es similar, debemos ir a través de uno solo que puede alcanzarlo por nosotros, Jesucristo.
Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Romanos 10:9
Dios necesita que confieses. A la mayoría le han enseñado que confesar significa decirle a Dios todos los pecados que ha cometido y pedirle perdón. Pero es simplemente imposible que puedas acordarte de todas las cosas malas que has hecho en toda tu vida porque incluso hay pecados de los que no eres consciente o ya no recuerdas haberlos cometido.
Dios no te va a pedir que hagas algo que es imposible de hacer. El es un Dios honesto y justo. Nota que en el verso no dice confesar tus pecados sino al Señor Jesús. Confesar significa decir la verdad. La Biblia enseña que la palabra de Dios es verdad.
Dios dice que Jesús murió por ti, fue sepultado por ti y resucitó de los muertos por ti (en un nuevo cuerpo) y que fue visto vivo probando que Dios aceptó el pago que dio por tus pecados. Debes confiar en la palabra de Dios cuando dice que eres un pecador, que necesitas un salvador y que el único que puede salvarte es Jesús.
Si crees que Dios dice la verdad, tómale la palabra.
Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.
Romanos 10:13
Invocas a Dios en oración. Esta no debe ser audible para que otros la escuchen, es una oración que sólo Dios debe oír. Invocar es llamarlo y pedirle confiando en lo que dice Su palabra y actuando en consecuencia.
Confiamos en que Él hará conforme nos dice en Su palabra. Él solo quiere que confieses, creas Su palabra y le pidas el regalo gratuito del cielo, de la vida eterna, que tiene para ti.
Cualquier niño puede creer esto y tomarle la palabra a Dios. Pueden comprometer su eternidad a Él en una oración pidiendo que les salve.
Las palabras que digas no son importantes como la fe en el corazón. Yo oré algo así cuando le dije a Dios que me diera su regalo:
Querido Dios, sé que soy un pecador y que no puedo ganarme el cielo. La Biblia es verdad. Creo que Jesús murió por mis pecados en la cruz, fue sepultado y salió vivo de la tumba. Por favor perdóname y sálvame para que pueda recibir la vida eterna y ser tu hijo para siempre. Gracias. En el nombre de Jesús. amén.
¡Así es! Él es fiel a su palabra. El dijo que si lo llamaba confesando y creyendo, Él me salvaría y así lo hizo. Él también nos dijo en su palabra:
El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.
2 Pedro 3:9
Y ésta es la confianza que tenemos en Él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.
1 Juan 5:14-15
Dios no quiere que nadie perezca. Si se lo pedimos creyendo, Él nos salvará porque es su voluntad.
¿He pecado desde aquella vez que le pedí a Dios que me salvara?
Sí, claro que he pecado.
¿Me quitará Dios el regalo que me dio?
No. Él me dio vida eterna, no vida “semi-eterna”. Yo me convertí en su hijo como dice su palabra y ese vínculo no se puede romper.
¿Acaso una persona puede dejar de ser hijo de su papá o su mamá?
No puede. Ese vínculo existe desde la concepción. Dios siempre será un Padre para quienes toma por hijos. Así como yo no puedo dejar de tener padres, ni los padres deshacer la relación con sus hijos, Dios tampoco nos quita la vida eterna porque eso implicaría que dejemos de ser sus hijos. Por eso la Biblia habla también de nacer de nuevo y si nací de Dios, seré su hijo para siempre.
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; y yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, mayor que todos es, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
Juan 10:27-29
Solo debes pedir y recibir el regalo una sola vez porque dura para siempre. Es por eso que se llama vida eterna. Es un regalo que no se desgasta, no se rompe, no se pierde y no nos cuesta nada. Nuestro vínculo de hijos de Dios siempre existirá y nadie nos puede arrebatar eso.
¿Y qué consecuencia hay si peco habiendo recibido la vida eterna?
Las consecuencias se pagan en vida, mientras estás en esta tierra. Como buen Padre, Dios se encargará de disciplinar a sus hijos. No hay que olvidar que cosecharemos lo que sembramos pero Dios no desecha al hijo rebelde. Recuerda la historia del hijo pródigo.
Tu salvación es eterna, el pecado ya no puede invalidar la palabra de Dios y por tanto, no puedes perder tu salvación. De otra forma Dios sería un mentiroso y Él nunca miente.
¿Qué debes hacer para estar 100% seguro que irás al cielo? Sencillo, cree lo que Dios te dice en su palabra y pídele que te salve.
Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable, he aquí ahora el día de salvación.
2 Corintios 6:2
¡Ahora es el mejor momento! No sabes si estarás vivo la próxima semana, esta noche o dentro de una hora. Si murieras irías al infierno si aún no has sido salvado, pero la buena noticia es que eso puede cambiar ahora mismo.
Tómale la palabra a Dios, arrepiéntete y deja de lado las ideas que te alejan de poner toda tu confianza en Jesucristo. No confíes en tu propia justicia y pídele que te salve.
La oración que yo hice es solo un ejemplo, pero puedes usar esas palabras como guía. Lo importante es tu sinceridad de corazón para con Dios.
Adelante, pídeselo en oración. Te espero mientras lo haces.
Si le pediste a Dios que te salve y has puesto tu confianza en Jesucristo, anota la fecha porque es tu cumpleaños espiritual. Tu espíritu ha nacido de nuevo.
Como yo soy un hijo de Dios y a partir de ahora tú también lo eres, eso nos hace hermanos.
Ya sabes a donde vas después de partir de esta tierra, pero Dios mediante aun tienes vida por delante. Ahora Dios quiere que crezcas espiritualmente, que sepas y hagas lo que a Él le agrada, no porque le debas algo, sino porque le amas sinceramente como Él te ama a ti y quieres poder hablarle a otros de su amor sin ser un hipócrita. Lee la Biblia, habla con Dios en oración, ahora eres su hijo. Busca una iglesia que enseñe la palabra de Dios y predique este mensaje para alcanzar a otros que aun no le conocen.
Dios te bendiga y te dé su paz. Si no te conozco personalmente en esta tierra ten por seguro que algún día nos veremos en el cielo.
Extraído y traducido de: http://militarygetsaved.tripod.com/heaven.html